“Juntos en todo”, observaciones sobre el medioambiente en La Plata

Bienvenidos a todos los lectores después de una pausa en publicar. La publicación de esta semana sigue un artículo que apareció en El Día, el diario regional de la ciudad La Plata que informa noticias en la provincia de Buenos Aires. Acá destaco las ideas y opiniones de pasantes de la Fundación Biosfera sobre los residuos sólidos urbanos y el transporte público de la ciudad.

La gente de Fundación Biosfera crítica la estrategia ‘Ciudad Verde’ de La Plata por su falta de organización y transparencia. Organizaciones como la CMNUCC han unido gobiernos internacionales para asumir metas de acción climática ambiciosos y claros -llamados CDNs (contribuciones determinadas a nivel nacional)-, pero este proceso no se ha filtrado al nivel regional en La Plata. La ciudad le falta un plan cohesivo, trans-seccional, a largo plazo para combatir las presiones específicas del clima y el medioambiente en la ciudad, con referencia a la recogida de residuos sólidos urbanos, el reciclaje y el transporte público, por lo que se pueda encontrar por recursos razonablemente accesibles de información públicamente disponible. La acción más alentadora al desarrollo sustentable era un Órgano Consultivo estatal que publicó un ‘Plan Estratégica’ para la ciudad en 2016, que delineó ‘debilidades’ de y dar sugerencias para mejorar directivas gubernamentales relacionados con recogidas y tratamiento de desechos. Según nuestro parecer, no se han actuado sobre muchos de estas directivas, un problema que discutiré más abajo sumado a lecciones de nuestras propias ciudades de procedencia.

Con relación al tratamiento de desechos, el Plástico es la palabra clave. Reconocido por el mundo como uno de los peores contaminantes de ambientes urbanos y naturales (los océanos, el campo, ciudades), políticos, la CMNUCC y militancias tal como Greenpeace han despertado conciencia pública sobre este asunto polémico. En mayo de 2016, el Órgano Consultivo subrayó la falta de eficiencia estatal en inculcar y incentivar prácticas positivas. A pesar de esta advertencia, y una norma escandalosa en La Plata, la dependencia en botellas, pajitas, embalaje y notablemente bolsas de plástico es una característica notable de la vida platense. Por ejemplo, lo normal es de ofrecer una nueva bolsa de plástico cada vez que vas al supermercado o la verdulería, en vez de animar la venta de ‘bolsas por vida’ (bags for life en inglés) durables y multiusos, que pueden generar un ingreso y publicidad para la tienda, mientras que reduzca su impacto medioambiental. Otra opción es de introducir un impuesto de bolsas de plástico, que provocó una disminución del 96% en su uso después de que cumplieran 9 meses. Un impuesto parecido abordaría el problema del exceso de bolsas de plástico que acaban en los vertederos de la provincia de Buenos Aires.

A nuestro modo de ver, lo que perpetúa el problema es la frecuencia y la falta de separación de la recogida de basura, que en algunos lugares hace una ronda diaria. Está demasiada regular para la mayoría de hogares y de hecho, anima a la gente que utilice más plástico de un solo uso por proveer una manera fácil y conveniente de echar residuos para que los ojos no vean, y que el corazón no sienta. Lo increíble es que las recogidas de residuos fuera del cuadrado son mucho menos regular, y por eso la única manera de desechar residuos sólidos sobrantes es a través de los vertidos incontrolados, así el servicio está doblemente derrochador. Mientras consume muchos recursos estatales, este servicio ni sirve para aliviar las presiones medioambientales en esta provincia populosa ni la desigualdad entre riqueza que se concentra en el centro de la ciudad y las afueras de pobreza relativa. Descubré más sobre el reciclaje y la gestión de residuos en La Plata por seguir este enlace.

Ahora a reflexionar sobre el transporte público. Las subvenciones gubernamentales a través del sistema de la tarjeta SUBE reducen el precio de viajar a prácticamente cero, un incentivo enorme al público para usar micros y trenes. Sin embargo, también increíblemente, parece que estas subvenciones financian un servicio poco fiable y ineficaz de forma prohibitiva. No hay un horario fijo, ni siquiera las versiones no oficiales corresponden a la realidad. El retraso del servicio se puede atribuir a una multitud de razones: el tránsito en las calles, micros ineficientes o lentos, o conductores que no obedecen las reglas de la carretera. Tal vez la causa principal, excluyendo el error humano, puede ser la concentración de micros en el centro de la ciudad, que resulta en la aglomeración en las calles y la concentración de contaminantes donde la mayoría de gente vive y respira. Una vez más, este problema es propicio a perpetuar las desigualdades socioeconómicas en las afueras, que están suministradas por menos líneas de micro y viajes más largos, que restringen el acceso a los salarios que se encuentre en el centro de la ciudad.

La ciudad moderna debe priorizar el peatón y modos alternativos del transporte al auto particular, si vamos a vivir en zonas urbanas más densas y eficientes. El excedente de espacio para autos en La Plata, tanto en la calle como en lugares de estacionamiento, permite que sea fácil y conveniente de conducir, pero también de contaminar sin culpa, taponar calles céntricas, y impedir que el transporte público funcione correctamente. Crear carriles de micros que circunvala el tráfico y toma atajos exclusivos son modelos aceptados en ciudades grandes como Londres y Bristol, y se difunde multas a autos que desafían estas regulaciones. La polución también se puede abordar por inversiones estatales o privadas en micros menos contaminantes, la instalación de filtros en caños de escape, o unidades completamente eléctricas que evitan los problemas de gases de escape, que -según el OMS (Organización Mundial de la Salud)- cobra 6,5 millones vidas por año.

Me doy cuenta que esta publicación se ha fundamentado más en opiniones que en hechos, una característica quizás más parecida a un blog según algunos. A pesar de esto, la dificultad de encontrar datos en el sitio Web de la municipalidad muestra la falta de transparencia en el funcionamiento de las autoridades locales en asuntos ambientales, un principio fundamental del proceso de la CMNUCC, que intenta unir actividades medioambiental a nivel internacional. A mi punto de vista, la ciudad debe estar más proactiva en tratar de platicar con sus ciudadanos sobre asuntos de importancia medioambiental, si La Plata desea juntarse al listado largo de autoridades locales que son contribuyentes a la solución, en vez de parte del problema.

Saludos,

Will Feakes